Vacía está mi pluma
como vacía estuvo una
vez,
mi alma.
Y en el vacío no crecen
el dolor,
la alegría ni la pena,
no crece nada.
Sin emociones no conozco
palabras,
sin palabras no hay
versos,
vacía pues está mi pluma
de ilusiones,
desengaños,
de rabia.